PULSO AL
FRACASO.
En una de las sesiones de clase, el profesor nos
puso un documental de TVE sobre los centros de segundas oprtunidades,
concretamente La fundación Tomillo , en la que muestran brevemente la historias personales de Juan,
Odei y Ainara, estudiantes que fueron derivados del centro de
secundaria donde estudiaban a módulos formativos.
Podríamos
decir y generalizar que estos chicos cumplen todos los requisitos que un
profesor NO quiere en el aula y que por más que trata de lidiar con ellos, se
ve incapacitado para ello y, por tanto la solución final acaba siendo
derivarlos a otro centro.
La misión
de este centro es reubicar a los chicos en el sistema educativo, que no
abandonen la escolarización, no obstante, prevalece la formación personal, el
mejorar la autoestima, canalizar los problemas familiares, evitar que sean tan
influeciables por el entorno para conseguir de ellos personas seguras y
competentes en el mercado laboral.
Es innegable, y de admirar el trabajo por parte
de los docentes que trabajan en este centro. Son labores muy difíciles en las
que te implicas con los alumnos a nivel personal para evitar que "tiren su
futuro por la borda", y esto muchas veces puede afectar al propio docente
en su persona.
Desde mi punto de vista, este vídeo, hace que
seamos conscientes de la realidad, que en el futuro si ejercemos como docentes
vamos a encontrarnos con chicos y chicas rodeados de circunstancias difíciles
que afecten en su rendimiento escolar. El problema está en lo que consideramos
"fracaso escolar". Está claro que por definición, refiere a aquellos
alumnos que no alcanzan los conocimientos mínimos de contenidos para aprobar.
No obstante, si únicamente valoramos conocimientos de historia, lengua,
matemáticas, filosofía etc., para consegir personas "aptas" en el
contexto escolar, dejamos a un lado muchas otras aptitudes como creatividad,
ingenio, visión espacial, imaginación y un gran etcétera, que son realmente
útiles para muchas funciones laborales necesarias en la vida cotidiana. La
misión de estos centros es dar a los chicos que "fracasan" en el
instituto otra oportunidad para que desarrollen otras aptitudes y adquieran
práctica para trabajar como camareros, mecánicos, electricistas, peluqueros...
Oficios igual de dignos y válidos que el de ingeniero, arquitecto o médico.
Hola Pilar. Yo soy docente, y leyendo tu artículo no tengo mas remedio que comentar que una de las situaciones mas difíciles con las que te encuentras en las aulas es este tipo de alumnado que no tiene motivación y que, ademas, debes tratarlo dentro del grupo en el que tu día a día es tratar de impartir un programa...
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